Análisis – Metal Thunder
La Épica Defensa Aérea en Clave Roguelike
Introducción
Desde las profundidades de un vasto y saturado mercado de videojuegos, emerge una propuesta que cautiva por su premisa singular y su ejecución pulcra. El juego en cuestión, Metal Thunder, ofrece una experiencia de simulación de artillería que desafía las convenciones del género de defensa. La obra ha estado disponible en el formato de acceso anticipado (Early Access) a través de Steam durante un periodo aproximado de seis a siete meses. Dicha fase de desarrollo no ha impedido que el título genere notables expectativas entre los aficionados a las experiencias militares más tácticas. El público conocedor de los simuladores bélicos ha recibido con interés esta iteración.
El estudio desarrollador ha logrado conjugar la adrenalina del combate aéreo con la profunda rejugabilidad característica de los juegos de la familia roguelike. Metal Thunder sumerge al jugador en el rol crucial del operador de armamento a bordo de una imponente fortaleza aérea. El objetivo central de la misión consiste en proteger una base militar terrestre de implacables oleadas de insurgentes y fuerzas enemigas. Esta mecánica evoca inmediatamente la recordada misión del avión artillado AC-130 Specter de títulos militares ampliamente reconocidos. Aquí, sin embargo, aquella experiencia puntual se expande y se convierte en el núcleo de la totalidad del juego.
El videojuego se cimenta sobre una base conceptual sólida, transformando el concepto de la defensa de la torre en una maniobra aérea táctica. La perspectiva única que ofrece, unida a la progresión dinámica de sus sistemas, garantiza una experiencia de juego fresco e inmersivo. La expectativa principal se centra en la próxima liberación del modo Campaña. Dicho modo promete profundizar la narrativa y las mecánicas estratégicas, especialmente en la gestión de unidades terrestres. Se anticipa que el título abandonará su fase de acceso anticipado en un periodo que oscila entre los seis y los doce meses a partir de su lanzamiento inicial en noviembre de 2024. El compromiso del equipo de desarrollo sugiere un futuro prometedor para esta incursión estratégica en el ámbito militar. La base jugable ha demostrado ser sólida y convincente.
Estamos muy agradecidos a Keymailer por habernos cedido una clave para probar este juego.
Pantalla de inicio
La primera impresión de Metal Thunder es de una originalidad notable dentro de un género ya muy visitado. El menú principal es funcional y dirige al jugador directamente a la acción principal. Se distingue claramente entre la opción de Campaña, actualmente marcada como un desarrollo futuro, y el modo Supervivencia. Este último constituye la espina dorsal de la experiencia disponible en el acceso anticipado. El juego se define claramente como una mezcla de simulación de artillería aérea y roguelike de defensa de puntos.
La estética inicial es decididamente militar y táctica. El diseño de la interfaz y los efectos visuales recuerdan a los sistemas de puntería de aeronaves reales. La atmósfera es inmediatamente inmersiva, transmitiendo la sensación de estar a bordo de una formidable máquina de guerra. La perspectiva adoptada es crucial para la identidad visual del título. Los jugadores tienen acceso inmediato a un sistema de mejoras permanentes al que se accede desde el menú principal. En este sistema se pueden invertir los puntos obtenidos en las partidas para aumentar la efectividad de los sistemas de armamento. Esto incluye variables como el alcance o el radio de explosión de las distintas municiones. Esta dualidad entre la mejora permanente entre sesiones y la progresión temporal en la partida es una característica clave del diseño.
La música y los efectos sonoros acompañan adecuadamente el tono marcial y de alta tensión del juego. Se enfatiza la inmersión mediante el uso de avisos de radio y voces que simulan las comunicaciones de la tripulación en pleno combate. El sonido juega un papel crucial en la experiencia, aportando una capa de realismo y adrenalina. Los géneros principales son la supervivencia y la gestión táctica de recursos bélicos. Todo el conjunto está envuelto en un manto de elementos propios del roguelike que dinamizan la rejugabilidad. El estilo visual de cámara térmica o infrarroja es dominante y contribuye a la atmósfera.
¡Comenzando a jugar!
El inicio de la partida se centra en la selección de una misión del modo Supervivencia. Esta es la única modalidad plenamente funcional en el acceso anticipado. Al comienzo, solamente un mapa está disponible para el jugador. El éxito y la destrucción de enemigos permiten desbloquear hasta un total de seis escenarios diferentes. Antes de entrar en acción, el jugador debe elegir su arma inicial. Esta es una decisión que resulta más estratégica de lo que parece. La elección de un arma más poderosa conlleva un tiempo de recarga significativamente mayor. Esto obliga al jugador a considerar el ritmo de combate deseado y la gestión de la cadencia de fuego.
Los primeros pasos en el juego son intuitivos, introduciendo al jugador en la perspectiva de la cámara del artillero. La visión predeterminada es la térmica, la cual resalta las firmas de calor de los enemigos sobre el terreno. Este modo visual es altamente inmersivo y se convierte rápidamente en la forma predilecta de la jugabilidad. Inicialmente, los enemigos son principalmente unidades de infantería, lo que permite al jugador familiarizarse con la precisión requerida para el disparo. Se debe compensar la caída de las municiones, simulando la altura del avión.
El verdadero gancho del juego se manifiesta con el sistema de progresión rápida que domina la jugabilidad. Al destruir enemigos, el jugador acumula experiencia y asciende niveles dentro de la partida. Con cada ascenso de nivel, se presenta una elección de tres mejoras temporales. Estas opciones pueden ser potenciadores para las armas existentes, como el aumento de cadencia, daño o radio de explosión. También puede significar el desbloqueo de un nuevo sistema de armamento para el arsenal actual del avión. Este flujo constante de recompensas dinámicas, típico de los juegos roguelike, genera un ciclo de juego adictivo. Es satisfactorio desde los primeros minutos y asegura la continuidad de la sesión. La necesidad de adquirir armas adicionales para gestionar los tiempos de recarga de las armas principales es un factor de enganche temprano.
Disfrutando de la partida
El corazón de Metal Thunder reside en su profunda y satisfactoria jugabilidad táctica. Dicha jugabilidad se desarrolla plenamente a medida que avanza la partida y se incrementa el arsenal disponible. La experiencia es una orquestación constante de disparos precisos y gestión de recursos bélicos en tiempo real. El jugador opera constantemente a través de la mirilla del artillero, pudiendo alternar entre la visión normal, la nocturna y la altamente recomendada térmica. Esta última es fundamental para identificar y seguir los movimientos enemigos sobre el terreno de combate, destacando sus siluetas de calor.
La progresión temporal dentro de la misión es un elemento central que se distingue por las mejoras de rareza que van desde lo común hasta lo legendario. La selección de mejoras debe ser estratégica. Cada elección define la «construcción» de armamento para esa partida específica. Es crucial decidir si potenciar un arma existente, por ejemplo, aumentando su radio de explosión o su cadencia de fuego, o si incorporar un nuevo sistema de armas al arsenal disponible. Estas decisiones tienen un impacto directo en la capacidad de respuesta del jugador.
El juego ofrece un arsenal diversificado y con características únicas. Se dispone de cañones de tiro rápido como la Gatling o el de 30 mm, ideales para la limpieza de la infantería. Además, se incluyen sistemas de armas pesadas con altos tiempos de recarga pero gran impacto. Entre ellos se encuentran los misiles Hellfire, las bombas Cluster (de racimo) y las municiones incendiarias como el Fósforo y el Napalm. El Napalm y el Fósforo permiten crear barreras de fuego en el campo, negando el paso a las unidades terrestres por un periodo de tiempo. El misil Maverick se revela como una opción altamente efectiva para neutralizar vehículos pesados y tanques enemigos. Dominar el tiempo de caída de las bombas, la munición disponible y el tiempo de recarga de cada arma es esencial para la supervivencia.
Un componente estratégico vital es la capacidad de desplegar fuerzas terrestres de apoyo. El jugador puede gastar puntos de combate, obtenidos al destruir enemigos, para invocar unidades de infantería, vehículos de transporte blindado (APC) y tanques. Estas unidades no son meros adornos. Actúan como una línea de defensa avanzada que puede repeler asaltos y limpiar áreas lejanas del objetivo principal. Además, es posible ordenarles que defiendan una posición específica o que se muevan a un punto determinado. Esto añade un nivel de microgestión táctica al combate. La protección de estas unidades se vuelve una prioridad. Su pérdida debilita significativamente el perímetro defensivo de la base.
La curva de dificultad está perfectamente ajustada. El juego pasa rápidamente de ser un simple «mata-mata» de infantería a un desafío complejo. La aparición de carros blindados y, más tarde, helicópteros obliga al jugador a maximizar la eficiencia de sus disparos. La coordinación entre las armas con alto daño y recarga lenta y las armas de limpieza rápida es la clave para manejar las oleadas avanzadas. Los avisos constantes por radio y los efectos de sonido contribuyen a un estado de inmersión y tensión que se mantiene hasta el final de la partida. Las sesiones de juego se convierten en una épica lucha por la supervivencia.
Sólo un rato más
En la actual versión de acceso anticipado, el videojuego se centra exclusivamente en la experiencia para un solo jugador. No se ha mencionado ni implementado una funcionalidad multijugador hasta el momento. La rejugabilidad (replayability) se convierte, por tanto, en un aspecto crucial para determinar su valor.
La duración del contenido existente se limita a un conjunto de seis misiones de supervivencia. Cada una de estas misiones exige una resistencia de aproximadamente veinte minutos ante las incesantes oleadas enemigas. A pesar de que las ubicaciones varían ligeramente en su configuración geográfica, el objetivo central de todas ellas es idéntico: la defensa de un punto vital en el mapa. Esta uniformidad en la meta puede hacer que el brillo inicial de la experiencia se desgaste con el tiempo para el jugador dedicado.
Sin embargo, el motor de rejugabilidad de Metal Thunder se alimenta de sus sólidos elementos roguelike. Cada sesión de juego es fundamentalmente distinta debido a la aleatoriedad de las mejoras ofrecidas al subir de nivel. Las decisiones sobre la construcción de armamento varían de una partida a otra. Esto fuerza al jugador a experimentar con diferentes combinaciones de daño, velocidad y área de efecto. Además, el sistema de mejoras permanentes entre partidas anima a los jugadores a repetir las misiones con un propósito claro. Esto se hace con el objetivo de acumular puntos para potenciar sus sistemas de armas en el menú principal. La duración de veinte minutos por misión está muy bien medida. Es el tiempo suficiente para desarrollar una construcción de armamento y enfrentarse a la máxima dificultad.
La verdadera longevidad del título recaerá en la prometida campaña principal. Se espera que esta modalidad introduzca objetivos más variados y una estructura de misiones más tradicional. Esto debería incluir misiones que exploten a fondo la microgestión de las tropas terrestres. Con ello, se trascendería la mera defensa estática del modo Supervivencia. Por el momento, el juego ofrece un ciclo de diversión adictivo.
Opinión
Metal Thunder se establece como una grata sorpresa dentro de su categoría de nicho. El concepto central de simulación de artillería desde un avión AC-130 ha sido brillantemente ejecutado. Ofrece una jugabilidad profunda, táctica y visceralmente satisfactoria. El juego consigue generar una inmersión completa en el teatro de operaciones. Lo logra gracias a una estética militar bien definida y un excelente uso de las comunicaciones por radio.
El sistema de progresión roguelike se integra de manera orgánica y efectiva en la fórmula. Dicho sistema convierte cada partida de defensa de veinte minutos en una carrera emocionante por la optimización de los sistemas de armas. La variedad del arsenal y la necesidad de gestionar los tiempos de recarga son elementos que aportan una complejidad estratégica muy bienvenida. Además, la inclusión de unidades terrestres controlables eleva el desafío de gestión. Es un juego que se siente sólido y pulido a pesar de su condición de acceso anticipado. La mecánica funciona perfectamente y el desafío es constante.
A pesar de sus muchas virtudes, el principal punto débil del juego en su estado actual es la limitación de contenido. El modo Supervivencia, aunque extremadamente divertido, se vuelve repetitivo al ofrecer esencialmente el mismo objetivo en diferentes escenarios. La ausencia del modo Campaña, que se anticipa como la parte más innovadora y variada, detiene al título de alcanzar su máximo potencial. Sin embargo, la calidad de lo ya implementado es indiscutible. La base es excelente. Es una recomendación firme para los aficionados a la táctica militar. Aquellos que lo adquieran ahora se beneficiarán de recibir el contenido futuro al completarse el acceso anticipado.
Puntos fuertes:
- Concepto único y excelentemente ejecutado, basado en la simulación de artillería aérea.
- Sistema de progresión roguelike profundo que asegura que cada partida sea diferente.
- Inmersión notable lograda por la perspectiva de cámara térmica y los efectos de audio militares.
- Gestión táctica desafiante del amplio arsenal y los tiempos de recarga de las armas.
- La inclusión de unidades terrestres aliadas añade una capa de estrategia adicional.
Puntos débiles:
- Contenido limitado en el acceso anticipado, sin la implementación del modo Campaña.
- La repetición del objetivo principal en los seis mapas de supervivencia disponibles.
- La curva de dificultad aumenta drásticamente, lo que puede resultar frustrante para algunos jugadores.
- Se requiere una gran precisión en el apuntado para armas con gran caída, lo que eleva el umbral de dificultad.
- La falta de variedad en los objetivos actuales debido a la naturaleza exclusiva del modo supervivencia.
-GRÁFICOS: 4
-NIVELES/HISTORIA: 2
-SONIDO: 4
-JUGABILIDAD: 5
-ENTRETENIMIENTO: 4
VALORACIÓN Y RESEÑA: 8.5/10
Friki todoterreno: Juegos de mesa, Pokémon, estrategia y gestión, RPG y fantasía.
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