TENDENCIAS HOY

Análisis – Plateup!

Análisis – Plateup! Una autentica pesadilla en la cocina

 

 

Ηoy nos encontramos ante Plateup!, un juego roguelite al más puro estilo Overcooked. Últimamente he jugado a varios juegos de este estilo que pese a seguir un estilo claramente definido, me han resultado muy diferentes entre sí y han provocado sensaciones distintas, incluso opuestas en algunos casos, así que una vez más, esta vez de la mano de The Yogscast a los que damos las gracias desde Somos Gaming me dispuse a probar este juego con la idea de ver que encontramos esta vez.

En Plateup vamos a ser un cocinero emprendedor dispuesto a crear desde la nada un restaurante y llevarlo al éxito, aunque no va a ser una tarea nada fácil. Tras un pequeño tutorial, algo corto y simple para mi gusto pues muchas cosas se quedan sin explicar, nos encontraremos en nuestras “oficinas”, punto de partida y de gestión de nuestros negocios. Y digo nuestros porque podemos tener más de uno, y dejarlo o retomarlo al gusto así como administrar los objetos y ayudas que consigamos y llevarlos a uno u otro.

 

Sencillo manejo además de intuitivo

 

Lo primero es nuestro personaje, un muñeco cómo a mi me gusta decir tipo “plastelina”, seguro que alguno con eso me entiende. Es simple, sin detalles más allá de la indumentaria y el color de la piel que podemos elegir desde el principio en nuestra habitación de la oficina.

Después tenemos una cocina donde practicar los menús antes de lanzarnos al mundo real, en ella según la receta que pongamos, podremos cocinar sin miedo al fracaso para dos “gatos” que son nuestros conejillos de indias Pobrecitos.

Cuando estemos preparados toca crear el “plan” del restaurante. Elegimos menú, ubicación y distribución o diseño del restaurante entre unas pocas opciones que irán aumentando según subamos de nivel y comenzamos.

Hasta aquí es todo sencillo, ahora es cuando viene lo serio. Empezamos en la cocina de nuestro restaurante, con los muebles, útiles y alimentos mínimos imprescindibles para el menú elegido, y enseguida empezarán a llegar los clientes.

 

No es tan fácil como parece. Hay que ser cauteloso con todo lo que rodea el negocio

 

Sin apenas tiempo de prepararnos, entran al restaurante los primeros clientes. Debemos esperar a que tomen asiento y se acomoden para acercarnos a su mesa una primera vez para tomar la “comanda” y saber que plato quieren. Esto al principio es sencillo, pues solo disponemos de un plato y la mayor preocupación será saber como quiere de hecho el filete o si quiere tomate en la ensalada.

Cuando sepamos que quieren, debemos ir rápido a preparar el plato. Aquí es donde llega el caos, hay que organizarse para cortar, cocinar, amasar, emplatar… y todo lo más rápido posible, pues en cada acción (incluida la recepción) aparece una barra en los clientes que va menguando con el tiempo. Esa es su paciencia, y si se agota antes de que les atendamos o sirvamos, se acabó… una mala reseña y nos toca cerrar el restaurante. Esto para mí es algo excesivo, un solo fallo te condena el restaurante … Además con el tiempo se va complicando nuestro trabajo, pues nosotros (y los clientes que pueden ser muy guarretes…) vamos manchando y mojando a nuestro alrededor, dejando un restaurante que acabaría con el temple del mismísimo “Chicote” y que hace que nos ralenticemos o incluso nos frenemos mientras vamos de un lado a otro.

Pero no os preocupéis, no se acaba el juego ahí, conseguiremos experiencia por nuestros actos y subiremos de nivel para obtener nuevos menús u objetos que podremos utilizar en nuestro próximo restaurante.

 

Mejoraremos nuestro restaurante con las mejoras proporcionas, dinero y reputación

 

Si conseguimos complacer a todos los clientes y acabar felizmente el día, recibiremos experiencia, para subir de nivel, dinero para mejorar el restaurante, y cada 3 días conseguiremos una estrella, al más puro estilo “Michelin”, que nos permite mejorar alguna cualidad del restaurante…

El objetivo principal del juego es el de sobrevivir 15 días, y creerme que no es un objetivo nada fácil. Si lo conseguimos iremos desbloqueando zonas de nuestra oficina que harán que tengamos mejores menús, almacén de objetos, mejoras y en general cosas que harán más fácil la supervivencia de nuestra cadena de restaurantes.

Un aliciente especial del juego, y que personalmente es cómo creo que más se disfruta el juego, es el modo multijugador. Permite jugar a 4 jugadores ya sea en modo local u online, y ahí el caos y la diversión se multiplican en gran medida.

Así pues, nos encontramos ante un juego de gestión y acción difícil de dominar, con momentos entretenidos y divertidos por un lado, y repetitivos y complicados por otro. Si no conseguimos dominar algunos aspectos o jugar con alguien que nos ayude, puede resultar frustrante o desalentador en algunos momentos y hacerte dejar el juego de lado. En definitiva, se vuelve “soso” (aprovechando la temática) en más de un momento del juego. He jugado a otros juegos de este estilo que me han enganchado más, añadiendo poco a poco pero de manera constante alicientes al juego, para engancharte y complicarte las cosas, pero sin hacerlo imposible. Además las mejoras u objetos que puedes comprar son muy aleatorias, y si encima la suerte no te acompaña, pues un restaurante que ya lleva varios días funcionando se puede ir al garete por un descuido o tontería. Aún con esto, es un juego que recomiendo probar al menos, para ver nuestra capacidad de organización y reacción si os gusta este tipo de juegos.

 

La satisfacción de que todo vaya bien y que gratifiquen por tus servicios no tiene precio

 

Los gráficos, aceptables, divertidos, sin mucho detalle pero fácilmente reconocible cualquier elemento o plato…

Sonido muy simple, una musiquita para amenizar el juego, algo monótona, y sonidos de algunos efectos como el cocinar y poco más.

La jugabilidad sería su punto fuerte, si no llegaran esos momentos en que te estancas en un restaurante o lo contrario, quieres mejorar y te engullen los clientes por falta de medios que el juego no te permite, y no por demérito tuyo.

La historia pues… es otra historia… El hecho de ser un cocinero emprendedor dispuesto a crear un restaurante o incluso una cadena, sería una buena historia pero se queda como un telón de fondo. Poca “chicha” que dirían algunos…

 

 

Desde Somos Gaming, agradecemos a The Yogscast por facilitarnos clave digital para poder traeros el análisis

Síguenos en X para no perderte nada, en nuestro canal de Youtube y en nuestros canales de WhatsApp y Telegram

David
Últimas entradas de David (ver todo)
Facebook
Twitter
Telegram
Skype
Pinterest
Digg
LinkedIn
Reddit
WhatsApp

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *