El imperio del César – Están locos estos romanos
Hemos hablado de algunos juegos complejos, como el Civilization, que incluye, claro está, largas horas de partidas y complicadas reglas. Estos juegos ofrecen en muchos casos más entretenimiento intelectual que una experiencia extremadamente divertida, lo que no quiere decir que no sea entretenido. Sin embargo, existen otra serie de juegos, que no se puede decir que sean para niños, pero tampoco para jugones duros, de un corte más familiar, que corresponden al juego que os traemos hoy en Somos Gaming.
Si estás buscando un juego sencillo con reglas muy básicas y que cualquier puede entender, que tiene un poco de estrategia y sobre todo un tema que puede atraer a esos niños de en torno a 10 años, “El Imperio del César” es un juego muy interesante para comenzar a jugar. Y desde luego, el que disponga de muchas figuras lo hace todavía más atractivo.
HISTORIA
Este juego diseñado por Matthieu Podevin que ha salido al mercado en 2022, es un juego que ha sido publicado por Holy Grail Games y que se basa en una de las franquicias de cómic franco belga más importantes.
El juego nos traslada a la antigua Roma, pero con un toque de humor y aventura gracias a su inspiración en los cómics de Asterix. Los jugadores se embarcarán en la tarea de construir un sistema de carreteras que conecten con la legendaria ciudad de Roma, mientras recorren todo el terreno de lo que será el Imperio Romano. Hay que tener en cuenta que como tal, el juego tiene únicamente a los personajes como excusa, ya que no hay mecánicas ni más detalles que lo entronquen con los comics del famoso galo rubio.
CONCEPTO
“El imperio del César” es un juego de 30 a 60 minutos de duración (aunque si se sabe jugar serán considerablemente menos), para entre 2 y 5 jugadores de 10 años en adelante, aunque niños que ya tengan dominio de estos juegos podrán jugar desde aproximadamente los 8 años. Por otro lado, hay ligeras variaciones de reglas para jugar a 2-3 jugadores y 4-5. Se considera juego rápido de colección de recursos y conexión punto a punto (carreteras), con la excusa de expandir la influencia romana conectando ciudades y recolectando tesoros
Lo que lo hace destacar es su capacidad para acomodar hasta 5 jugadores sin sacrificar la duración del juego. En aproximadamente una hora como mucho, los jugadores pueden sumergirse en una emocionante competencia por construir las mayores carreteras que conduzcan de regreso a Roma. Además, podemos considerar el juego como bastante rejugable y que requiere estrategia táctica y planificación a largo plazo.
MATERIALES
Para comenzar, echemos un vistazo a los componentes que hacen de “El Imperio del César” una experiencia visualmente impresionante y táctilmente gratificante:
El el interior del juego encontraremos un mapa del Mediterráneo y Europa hasta Bretaña, reversible para jugar 2-3 jugadores o bien 4-5. El gramaje del cartón es muy bueno y el mapa es extraordinariamente amplio y claro.
Fichas grandes de cartón que con diferentes colores representan ciudades, lo que añade un toque visual distintivo al juego. Estas ciudades darán puntos al final del juego. Además, tenemos fichas pequeñas que representan recursos que otorgan puntos, creando una dinámica de recolección estratégica.
Fichas de plástico que representan los caminos controlados por los jugadores, facilitando la visualización de las rutas. Dichas fichas representan a patrullas de legionarios romanos.
Tablero de jugador personal y marcador de puntos para llevar un registro claro del progreso y las puntuaciones, también en cartón de buen gramaje.
Visualmente, “El Imperio de César” es impresionante, y es un juego vistoso y agradable para cualquier persona. Desde las miniaturas de soldados hasta el diseño del tablero, cada elemento está meticulosamente diseñado para capturar la esencia de la Roma desde la visión asterixiana. La presencia de detalles como la sombra de César sobre el tablero añade una capa adicional de inmersión, junto con detalles como diversos personajes. 
MECÁNICA
El juego comienza con el tablero grande donde se colocan los tokens de ciudad y los tesoros. Las ciudades se colocan según diferentes zonas, que vienen marcadas en el tablero. Su valor dependerá de la distancia a Roma (lo que hará más valioso ir más lejos a construir carreteras). Por otro lado, las fichas de tesoro se colocarán de forma totalmente aleatoria.
Por su parte, cada jugador recibe un tablero de puntuación y miniaturas de carretera/patrullas romanas en su color. Los tokens de puntuación se colocan en el tablero y ya no hay nada más que hacer ¡listo para empezar! Esta es otra virtud de este juego, que corresponde a la velocidad para montarlo, pero así mismo para recogerlo.
El juego se desarrolla mediante turnos, donde cada jugador conecta una ciudad a Roma, ganando puntos y recursos en el proceso. Y en eso consiste el turno, sin más. Decidir qué ciudad que no haya sido previamente conectada con Roma conectar. Para ello, se usan las ciudades ya conectadas como punto de salida. La estrategia radica en decidir qué ciudades conectar y en qué momento hacerlo para maximizar los puntos y bloquear las jugadas de los oponentes. Cada jugador toma la ficha de ciudad, que vale cierta cantidad de puntos (que se contarán al final), toma la ficha de tesoro colocada encima (que irá a su tablero personal de puntuación) y se sumarán puntos por la longitud de la ruta a Roma. Debes tener cuidado, ya que solo cuentas la ruta más corta de regreso a Roma, ¡lo que puede cambiar durante el juego!
Una de las características más importantes del juego es la mecánica de puntuación de rutas, que premia a los jugadores por trazar las rutas más directas hacia Roma, y a la par más largas. Esta dinámica no solo agrega tensión a cada turno, sino que también fomenta la interacción entre los jugadores, ya que cada movimiento puede afectar el resultado final. Cada vez que se crea una ruta nueva, se puntúa esta de forma más directa hasta Roma, dando puntos por cada figura de carretera/patrulla que cada jugador tenga. Esto es, si un jugador tiene 3 figuras y otro 1 en la ruta, ganarán esta cantidad de puntos, aunque el jugador de 3 puntos sea el que pusiera la figura correspondiente.
Al final del juego, las ciudades conectadas otorgan puntos, pero cada jugador solo puntúa la ciudad de cada color con mayor puntuación que tenga. Esto añade un elemento de competencia adicional y obliga a los jugadores a tomar decisiones estratégicas sobre qué ciudades priorizar. Además, la acumulación de diferentes recursos y monedas proporciona puntos adicionales, premiando por un lado la diversidad de recursos conseguidos y por otro la cantidad del mismo recurso obtenida.
Todo ello, sumado a la puntuación obtenida anteriormente por las rutas, hace que se alcance la puntuación total de partida. El jugador con más puntos en este momento ganará la partida.
PREMIOS
No es un juego especialmente premiado, al ser un juego de los que consideramos principalmente familiar. Sin embargo ,ha sido nominado en 2022 como mejor juego familiar por Tric Trac, una prestigiosa revista de juegos de mesa, aunque finalmente no resultó ganador.
MI OPINIÓN Y EXPERIENCIA
A partir de este momento, expongo mi opinión y experiencia, y cedo la objetividad dando paso a la subjetividad más personal:
Una de las principales fortalezas de este juego radica en su simplicidad, en su rapidez de montaje y en la diferencia entre cada partida. En cada turno, los jugadores colocan sus soldados para construir una carretera, acumulando puntos basados en la longitud de sus rutas. Esta mecánica directa y sin complicaciones permite que los jugadores se sumerjan rápidamente en la acción, sin tener que preocuparse por reglas complejas o largas explicaciones.
Como punto negativo, en opinión personal, a pesar de su título evocador, “El Imperio de César” carece de una integración significativa con los comics de Asterix, o alguna referencia que te haga sentir dentro. Aunque el arte del juego presenta referencias visuales a los personajes de Asterix, la mecánica del juego no los incorpora de manera relevante. Esto puede decepcionar a los fanáticos del cómic que esperaban una experiencia más temática. Por otro lado, los fans en la BGG han hecho una miniexpansión que los incluye.
En conclusión, “El Imperio de César” es un juego que merece la atención de aquellos aficionados a los juegos de mesa que busquen combinación de mecánicas simples, tiempo de juego rápido y temática atractiva. Todo esto lo convierte en una opción ideal para una variedad de ocasiones, desde noches casuales de juego con amigos hasta sesiones familiares. Aunque la integración de la temática de Asterix podría haber enriquecido la experiencia, la calidad del juego en sí misma lo hace digno de ser explorado.
– DURACIÓN: 30 a 60 minutos.
– EDAD: 10+
– JUGADORES: 2 a 5 jugadores
– COMPLEJIDAD: 1,5 / 5
– MATERIALES: 4,5 / 5
– MECÁNICAS: 3 / 5
– SOLITARIO: 0 / 5 No tiene modo solitario.
– NOTA GLOBAL: 7 / 10
A día de hoy, no hay versión digital de este juego
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